La Punta es una pedanía de huerta situada en el sur de la ciudad de valencia, en la que, hace ya más de 15 años, el proyecto de “Zona de Actividades Logísticas” (ZAL) del puerto de Valencia selló uno de los capítulos más negros de la historia de la destrucción de la huerta de valencia con la deportación de un centenar de familias, privándolos de su forma de vida y arrasando con campos y casas, para cederle al puerto un enorme solar urbanizable.
La resistencia del vecindario y colectivos sociales no evitó la destrucción de la Punta, pero sí la puesta en marcha de la ZAL.
Los tribunales, con tres sentencias judiciales(2009, 2013 y 2015), han anulado el Plan Especial de la ZAL. Legalmente se ha vuelto al punto de partida.
En pleno siglo XXI y en el contexto de crisis ecológica en que vivimos, tenemos oportunidad de repensar el futuro de la Punta y de nuestro territorio. Sin embargo, , este año (2018) lo que se pretende es reactivar el proyecto de la ZAL adornándolo con un “corredor verde” y un carril-bici. La zona de la huerta de la Punta ha quedado fuera de los proyectos esperanzadores de protección de la huerta y litoral.
La lucha de la Punta y todo lo que ese espacio significa para la ciudad de valencia, se merecen mucho más que volver a intentar resucitar este proyecto, heredero de la vorágine urbanística depredadora de las últimas décadas.
Es por eso que reclamamos:
La paralización del “Plan Especial de la ZAL de Valencia”. El Puerto
de Valencia, sin ZAL, ha triplicado su movimiento comercial los últimos
quince años, cuestionamos, por lo tanto, su necesidad, además del propio
modelo comercial que promueve.
La apertura de un proceso de participación ciudadana. Hace 35 años los
valencianos y valencianas ganamos un futuro para el cauce del Turia y
decidimos que acogiera un gran parque urbano. Ahora reclamamos el
derecho a decidir qué futuro queremos para los terrenos de la Punta. El
dinero invertido no puede servir de excusa para que la ciudad renuncie a
la posibilidad de disponer de un auténtico territorio verde que enlace
el antiguo cauce del Turia con el Parque Natural de la Albufera.
Que se reparen las injusticias cometidas con los vecinos y vecinas.
Queremos que se dé la oportunidad a las familias deportadas para volver a
vivir y trabajar las tierras de l’Horta de la Punta. Que vecinos y
vecinas tengan la oportunidad de decidir el futuro para este territorio.
Queremos una ciudad verde que tenga la Albufera y l’Horta como espacios intocables de goce y producción de alimentos preparada para los retos que plantea el cambio climático, no una ciudad condenada a ser un apéndice de un puerto industrial.
Queremos decidir nuestro futuro entre todas y no estar subordinados a los intereses de los más poderosos y por lo tanto aceptar acríticamente sus decisiones.
AYÚDEMOS A DEFENDER LA HUERTA Y PARAR LA ZAL